La iniciativa, puesta
en marcha durante el solemne triduo de patronazgo de nuestra Madre en febrero
de 2016, se encuentra enmarcada dentro del plan pastoral de la futura coronación
canónica de nuestra Carmelita.
Texto: Jesús Manuel Redondo Alba
Imágenes: devotos
Hace
casi un año, durante la celebración del último día del triduo de patronazgo en
honor a Nuestra Señora del Carmen, Patrona de Rute, se ponía en marcha la
primera de las acciones pastorales de la coronación canónica de nuestra Madre:
la visita domiciliaria a los hogares ruteños de la urna con la bendita imagen
de la Señora.
Durante
la celebración de aquel día de triduo, D. Luis Jiménez tuvo el privilegio de
ser el primer ruteño en recibir en su casa la imagen de la Madre de Dios para
convivir con Ella durante una semana, compartiendo y haciendo partícipe a la
Madre de Dios del día a día, de nuestros problemas, de nuestras preocupaciones,
de nuestra melancolía, con el objeto de que la Santísima Virgen María sea
contra todo lo anterior la principal causa de nuestra alegría.
Desde
entonces, cientos de ruteños esperan impacientes su turno para recibir la urna
con la imagen de nuestra Patrona, lo que pone de manifiesto el incontestable
éxito de esta iniciativa pastoral que, sin duda alguna, está sirviendo como
preparación a los devotos de nuestra Madre y a los ruteños en general para la futura coronación canónica de su Reina
y Señora.
Del
testimonio de las familias ruteñas que han tenido el privilegio de recibir la urna
con la imagen de la Señora se desprende lo rapidísimo que pasa el tiempo concedido
a cada familia ruteña para que pueda tener la urna en el seno familiar, lo que
corrobora que María, a todas luces, amén de ser el único y exclusivo vehículo
para llegar a Dios, se convertirá próximamente en la auténtica protagonista del plan pastoral de coronación
a la hora de ‘evangelizar Rute con Ella’.
Que
la santísima Virgen del Carmen nos otorgue la fuerza suficiente para que nos
mostremos con valentía como auténticos y
verdaderos cristianos en este continuo camino hacia Jesús que es la vida
terrenal a la que nos enfrentamos, y que su santo escapulario sea el antídoto
único e indispensable para ahogar nuestra melancolía, nuestra tristeza, nuestra
amargura y desilusión.
Por
algo, la Reina y Señora de Rute es
Patrona nuestra y causa permanente de nuestra alegría.
Que
así sea.
Nota:
Las personas interesadas en recibir la visita domiciliaria con la bendita imagen
de María Santísima del Carmen deben ponerse en contacto con D. Antonio Padilla
Cruz, miembro de la comisión de coronación responsable de la organización de
las visitas de la urna, con cualquier miembro de la comisión de coronación o
con cualquier componente de la junta de gobierno de nuestra Archicofradía
patronal. Gracias.
¡VIVA LA VIRGEN DEL
CARMEN!
¡VIVA LA PATRONA DE
RUTE!
¡VIVA LA MADRE DE
DIOS!
¡VIVA LA EMPERATRIZ
CARMELITANA RUTEÑA!
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